Luz Amanda Monroy S.
Química Farmacéutica – Postgrado en Dermocosmética
CDE LABORATORIOS S.A.S
La vitamina C (Acido Ascórbico) es un cofactor esencial para el organismo y para la piel interviniendo en procesos fundamentales como la síntesis de colágeno y como antioxidante neutralizando diferentes tipos de radicales libres. Otros estudios han confirmado su capacidad aclarante y de mejora de la luminosidad cutánea y el efecto protector para evitar el fotodaño, el eritema y la inmunosupresión.
Químicamente la vitamina C tiene una estructura análoga a la fructuosa y posee acción hidratante. También su molécula es semejante a los alfa hidroxiácidos y actúa como exfoliante suave.
La vitamina C no puede ser sintetizada por el organismo, pero es fundamental para su la salud. Debe ser suplida desde la ingesta diaria por la alimentación o suplementación complementaria. Desde los años treinta fue reconocido su uso frente al escorbuto, se divulgaron las consecuencias de su déficit en el organismo humano y se establecieron fuentes alimenticias necesarias para mantener los niveles fisiológicos. En el caso de la piel la deficiencia de la vitamina C se evidencia por fragilidad cutánea, falla en el proceso de cicatrización y sangrado en las encías, entre otros. Para el cuidado de la piel debe ser suplida con la alimentación equilibrada y con aplicaciones tópicas para cumplir las diferentes funciones esenciales.
Como antioxidante actúa como agente reductor neutralizando de manera efectiva radicales libres que pueden alterar el organismo. Trabaja de manera coordinada con la vitamina E manteniendo su configuración activa en el proceso antioxidante frente a la polución y la exposición a la radiación solar.
Como cofactor en la síntesis de colágeno activa las enzimas responsables de los procesos de hidroxilación de la prolina y la lisina. Esta función es necesaria tanto en los procesos de cicatrización como en la síntesis de proteínas necesarias para mantener la salud de la piel.
La revolución química evoluciono con la síntesis de un nuevo derivado de la vitamina C que confiere el efecto farmacológico a nivel tópico, con mayor afinidad a la barrera cutánea y con estabilidad garantizada. Este desarrollo corresponde a la creación de la nueva molécula denominada 3-O-Ethyl Ascorbic Acid que se convierte a nivel endógeno en L-ácido ascórbico con funciones biológicas comprobadas.
Otra innovación incluye el desarrollo de una matriz que integra el oro como elemento que mejora la estabilidad de la vitamina C, controlando de manera efectiva su migración dentro de la piel. Estas dos mejoras estabilidad y biodisponibilidad disminuye de manera drástica la concentración óptima para cumplir su función dermatológica como antioxidante y regenerador cutáneo. Mayor potencia, menor dosis y penetración efectiva con ensayos in vitro e in vivo.
Bibliografía:
Pullar, J. M., Carr, A. C., & Vissers, M. (2017). The Roles of Vitamin C in Skin Health. Nutrients, 9(8), 866. Ver
Iliopoulos, F., Sil, B. C., Moore, D. J., Lucas, R. A., & Lane, M. E. (2019). 3-O-ethyl-l-ascorbic acid: Characterisation and investigation of single solvent systems for delivery to the skin. International journal of pharmaceutics: X, 1, 100025. Ver
- Radicales libres: Moléculas que tienen un electrón desapareado que altera su estabilidad química y se activan energéticamente afectando otras moléculas, células y reacciones en el organismo. Cuando un radical libre reacciona con un compuesto que no es un radical se forman otros radicales libres, produciéndose una reacción en cadena hasta que dos radicales libres reaccionan entre sí o son neutralizados por antioxidantes.
- Fructuosa: Azúcar similar a la glucosa que actúa en la piel como hidratante.
- Alfahidroxiácidos (AHA): Son moléculas con múltiples funciones en la piel desde humectantes hasta exfoliantes dependiendo de su concentración, la forma cosmética y el pH.